RECONSTRUCCIÓN DE LA HISTORIA DE LA EDUCACIÓN DE NUESTRA FAMILIA
Uno de los últimos proyectos que llevamos a cabo de forma grupal fue la
reconstrucción de la historia de la educacion de nuestras familias. El objetivo de este trabajo fue el de ver la transición y evolución que ha ido sufriendo la educacion con el paso de los años.
Como metodología, previamente nos reunimos todas las componentes del grupo para así elaborar un listado con las preguntas sobre las que queríamos investigar, las muestras que escogimos fueron familiares y amigos de distintas edades y generaciones.
En la primera generación agrupamos a todos nuestros abuelos y abuelas ya que correspondían a los años más anteriores en la educacion. En la segunda generación cada una de nosotras incluimos las entrevistas que les hicimos a nuestros padres y madres; para concluir esta división por generaciones presentamos la tercera generación, en esta incluimos a hermanos, amigos, primos,etc.
Una vez seleccionadas las preguntas y los sujetos para nuestra investigación pasamos a trabajar con ellos, para conseguir información lo hicimos por medio de una entrevista a cada uno de nuestros familiares y amigos. Algunos de ellos accedieron a salir en vídeo y otros simplemente les pudimos grabar por voz. Aun así,
¡Muchas gracias a todos!
Una vez recopiladas todas las entrevistas que conseguimos procedimos a traspasar todos los datos a unas tablas para así poder hacer mas visible y mas atractiva la comparación de la educación en las diferentes generaciones.
Cuando terminamos esta labor de ordenar toda la información que nuestros familiares nos proporcionaron encontramos una serie de diferencias en lo que se refiere a los métodos de enseñanza.
Como conclusiones hemos podido
comprobar que la educación ha ido evolucionando a lo largo del tiempo, donde
hemos visto mayor contraste y evolución ha sido desde la primera generación,
nuestros abuelos, hasta la nuestra que hace referencia a la tercera generación.
En la época de nuestros abuelos y
padres, los profesores eran personas muy respetadas y que imponían respeto a
los propios alumnos, e incluso, a los padres de estos. Algunos de ellos no eran profesores como tal,
ya que podían ser personas que aun desempeñando otro oficio que no fuese el de
la enseñanza como tal, eran personas lo suficientemente cultas como para
transmitir sus conocimientos de cultura a niños, los cuales, no podían
permitirse el lujo de asistir a un centro escolar por diversos motivos.
Otro aspecto que nos ha llamado
mucho la atención en lo que respecta al profesorado de antes y en contraste al
que actualmente tenemos, es que se produce una clara evolución en los métodos
de castigo: mientras que nuestros abuelos y padres recibieron castigos físicos
tales como darles en la palma de la mano y en los dedos con objetos de
madera como por ejemplo reglas, batutas,
etc, la tercera generación tiene la suerte de no experimentar ese tipo de
castigos por parte de su profesor, ya que, en este caso, los castigos pasan a
ser ejercicios y actividades extras, aumento de horario, etc.
Por otro lado, y centrándonos en
estas dos generaciones, hemos visto una clara evolución en lo que respecta al
tema de la distribución del alumnado en las aulas: mientras que en la educación
de nuestros abuelos encontramos que los centros y clases estaban divididos por
sexos, según vamos avanzando a lo largo de los años, esta tendencia de separar
a los niños por sexos va desapareciendo, tanto es así que ya desde la educación
que recibían nuestros padres encontramos clases mixtas y con alumnos de la
misma edad, todos ellos juntos en una misma clase. Actualmente, y como sabemos,
las clases no se encuentran divididas por sexos ya que tanto niños como niñas
conviven en un mismo espacio durante el proceso de enseñanza-aprendizaje.
En lo que respecta a los contenidos
que se impartían en su educación podemos observar que nuestros abuelos
primeramente no tenían asignaturas como tal, los conocimientos y aprendizajes
que se les impartían eran bastante simple, tanto es así que se limitaban a
proporcionarles las cuatro operaciones matemáticas para poder afrontar su día a
día, algunos labores domésticos y el saber leer.
Ya nuestros padres sí que
tenían asignaturas y el campo de la educación
se extendía un poco más, pero tampoco en exceso, puesto que, comparando su
educación con la que tenemos hoy en día se queda bastante lejana a las
competencias y objetivos que hoy en día nos brindan nuestros profesores.
Por último y atendiendo a lo que se
refiere el campo de la educación, hemos encontrado una clarísima evolución en
la demanda de idiomas por parte de los profesores a los alumnos: mientras que
la tercera generación no tenía por costumbre aprender ningún otro idioma que no
fuese el español, ya en la segunda generación podemos ver la aparición de otros
idiomas como el francés pero no es hasta nuestra generación (tercera) cuando
los docentes y la sociedad misma presentan una mayor exigencia a los niños,
adolescentes y jóvenes en la adquisición de nuevos idiomas, el más importante y
demandado entre ellos es el inglés.
Estas son algunas de las
peculiaridades que hemos encontrado en la evolución de la educación desde
nuestros abuelos hasta hoy en día.
Por tanto, queda evidenciada la
gran evolución que se ha desarrollado con el paso de los años hasta hoy en día
pero no debemos estancarnos en el modelo actual de educación ya que ésta está
en continuo cambio.